El Fútbol Club Barcelona representa para el planeta fútbol mucho más que la súper élite. Desde hace décadas, el deporte rey ha visto a Can Barça convertirse en una suerte de Ágora, donde se mira de cerca su esencia, se aprehende, se reinterpreta y se idea un modelo de juego que sacuda sus reglas.

201 zarpazos del Tigre
Era verano del 2016, y mientras algunos daban por terminada su carrera en la élite, Radamel Falcao García regresaba al principado de Mónaco con los colmillos afilados y la mirada enfocada en la red. Volvía para comandar a un joven y talentoso equipo que, con el aporte de 30 goles suyos, terminó la temporada ganando la Ligue 1 y colándose en las semifinales de la UEFA Champions League.

Lerma ante cada lance
Como un baby boy del Pecoso más, Jefferson Lerma salió a las pantallas del Fútbol Profesional Colombiano por allá en 2013. En ese momento, con 19 abriles, exhibió un par de cualidades físicas, caso del despliegue y el ritmo, muy por encima de la media. En una Liga lenta como la colombiana y a su edad, son factores que resultan decisivos a la hora de imponerse con relativo abuso en el campo.

La confianza lo es todo
Carlos Darwin Quintero llegó a dominar la Liga MX. Su sociedad con Oribe Peralta catapultó a Santos Laguna a pelear cada temporada por el campeonato. Partiendo desde la banda derecha, el nariñense recibía al pie, aceleraba, regateaba, combinaba con Peralta en la frontal y generaba el caos. La velocidad y precisión con la que ejecutaba todo era insostenible para todos los equipos del campeonato mexicano.

Muriel en primetime
Aunque el ’10’ era y sigue siendo el rey con su corona, su trono y su cetro dorados, el ‘9’ de plata levantaba elogios y augurios de buena hora con su sonrisa y su cintura tropical. Era 2011. Aquel mismo año la HBO lanzó al aire su serie de épica fantástica con ambientación medieval, Juego de Tronos, encumbrándose como reina del primetime.

Está solo
La lesión de Alexander Mejía en la liguilla del Apertura 2016 terminó siendo decisiva para que el León cayera en semifinales ante el campeón Tigres. El mediocentro barranquillero vivía un momento de forma inmejorable, dotando al centro del campo esmeralda de orden y coherencia; convirtiéndole en un candidato real para alzarse con la copa.

James rojo
Uno intuye por cómo fue la negociación, por los rumores, por las noticias y por las declaraciones de varias partes, que James Rodríguez eligió su destino y que, en otras palabras, escogió a Carlo Ancelotti. El italiano ha sido el único entrenador que le ha dado a James su rol idílico con la constancia y regularidad que un futbolista de su estatura necesita para sentirse importante y rendir a su mejor nivel.

James blanco
Los clubes grandes de Europa son conglomerados superprofesionales que tienden a cuidar el más mínimo detalle y que desde la década pasada han formado una red de scouting global para controlar al máximo el mercado de fichajes. Para 2007, sería lógico pensar que ya todos los mejores clubes del viejo continente poseían en sus carpetas un archivo con el nombre de James Rodríguez

Un aroma regular
Las tarde-noches europeas del mes de abril se han acostumbrado con el pasar de los últimos años a percibir el aroma de un buen café. Cerca a los estadios en los que se juega el mejor fútbol del mundo cada año para estas fechas, se asoma un olor familiar, delicioso y penetrante que cautiva tanto como la zurda de James, la cadera de Cuadrado, o la fuerza indómita de un viejo y sabio Falcao.

¿Por qué no juega (tanto)?
James aterrizó en Madrid tras un mundial consagratorio. Al llegar a la casa blanca, ya tenía un hueco imborrable en la historia gracias al botín de oro de la Copa del Mundo y por eso su arribo tuvo toda la parafernalia de las grandes estrellas